CIME se sumó a la conmemoración por el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia

En el año 2015 la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 11 de febrero como el "Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia". Desde ese entonces, se organizan en todo el mundo actividades de educación y sensibilización pública en la búsqueda de promover una creciente convocatoria social para concientizar sobre el importante rol que encarnan las mujeres en el ámbito científico.

Es de público conocimiento que uno de los Centros que flamea esta bandera que aboga por la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres en el sistema, es el CIME. Por eso, en el marco de esta celebración, el Centro de Microscopía electrónica, dependiente del CONICET y la Universidad Nacional de Tucumán, organizó en su predio una jornada científica para niñas y adolescentes de escuelas de la provincia.

“Ser científicas por un día” fue el lema de la actividad  que convocó a estudiantes de Tafí Viejo, y que tuvo por objetivo “romper los estereotipos, desafiar el sesgo de género y derrotar la discriminación en la ciencia”, según expresiones de la Responsable Científica del CIME, doctora Virginia Albarracín.

La propuesta que incluyó charlas, experimentos, observación de muestras biológicas en microscopios, juegos y proyección de vídeos de microfotografías, se inició con la bienvenida de Albarracín a las visitantes. En su charla, la investigadora matizó sobre la participación que las mujeres tuvieron en la ciencia a lo largo de la historia, y cuán significativo es comenzar a desterrar las estigmatizaciones a la hora de pensar en una carrera científica. "La ciencia es en esencia inclusiva y plural, y en ella las mujeres deben tener plena participación y reconocimiento, algo que históricamente no fue tan evidente", remarcó en esta línea Albarracín.

Luego de la etapa inicial, las jóvenes armadas con guardapolvos, guantes y haciendo uso de microscopios, descubrieron el oculto micromundo de las bacterias: “Para las niñas y adolescentes fue muy agradable aprender a usar esta tecnología y poder experimentar con microbios totalmente invisibles para el ojo humano”, dijo Albarracín, artífice de la iniciativa en la que además participó el resto del equipo del CIME e investigadoras del CONICET en la provincia provenientes de diferentes disciplinas.

PARTICIPANTES

PAULA BOLDRINI, arquitecta y doctora en Ciencias Sociales.

MÓNICA TIRADO, doctora en Física y nanotecnóloga.

SOFÍA NEDER, arqueóloga.

INÉS MERCADO, doctora en Biología (Fundación Miguel Lillo).